Los que han visitado un cabaret, saben que es el desorden, el placer está a la orden del día, bueno, dependiendo del nivel del lugar, hay cabaret en donde prevalece el orden y el respeto, hay lineamientos, reglas que deben seguirse al pie de la letra, de lo contrario te sacan y no se vuelve a entrar, al de bajo nivel, es un despelote, la ley del más fuerte, el desordenado y el listo, se apoderan de todo, son los que sobresalen.
Así juega la selección de Honduras, así como se manejan las cosas en el cabaret de bajo nivel, sin compromiso, sin respeto al compañero, las buenas intenciones quedan en el olvido, el despelote lo arman todos, así está la selección, con jugadores que no tienen capacidad para pensar rápido, futbolista que no levantan la mirada para enviar un pase al compañero, con jugadores que juegan con nombres, no por el buen momento futbolistico que pasan.
Es la idea de Fabián Coito, jugar al estilo del cabaret de bajo nivel, en donde las enfermedades están a la orden del día, eso pasa en la selección de Honduras, jugadores vulgares, que en pleno camerino están con el teléfono en las manos ante la mirada de un técnico incapaz, vulgar, permisivo y miedoso, un técnico siego, que no ha podido abrir los ojos para identificar un problema que aún tiene solución en la selección.
Se compara con un cabaret, porque juega el menos indicado, al cabaret entran los que quieren, la vía es libre, así pasa en la selección de Coito, hay espacio para todos, para delanteros que nunca están en sus posiciones, y no reciben un reproche, comienzan jugando mediocre y terminan igual, futbolistas sin capacidad para interpretar la poca idea de un técnico que se ha convertido en una mentira para el fútbol de Honduras.
Esta selección que comanda Coito, no corre, no tiene la capacidad de hacerlo, tampoco camina, sus pies son extremadamente cortos, sus jugadores son incapaces de hacerlo, confunden todo sobre el terreno de juego, no identifican en que sector de la cancha están, lo mismo que pasa en un cabaret cuando has perdido lo estribos, no sabes a quien elegir, eliges cualquier cosas, y esto te lleva al fracaso.