Antonio Conte es un técnico de ciclos cortos acostumbrado a configurar sus propias plantillas, un técnico que necesita de un perfil de centrocampista que aguante al equipo, y donde la figura de un delantero goleador es imprescindible, pero el 5-1 en el Camp Nou ha acelerado la llegada del italiano. La idea inicial de confiar en un técnico como Solari – “si Zidane nos salió bien, puede salirnos bien con Solari…”, pensaron en la Casa Blanca– se ha diluido por la necesidad de dar un golpe de efecto con un técnico de mano dura, sin miramientos para dejar fuera a las ‘vacas sagradas’ y con las ideas muy claras.
Florentino Pérez se ha cansado de que los jugadores importantes del equipo sean los que mandan, está cansado de la auto-complacencia y de la falta de disciplina. El 5-1 ha sido la confirmación de que tenía razón al querer cesar a Lopetegui hace dos semanas.
Conte tiene pendiente la próxima semana el juicio contra el Chelsea por la compensación de 10 millones de euros por el año de contrato que le queda con el club londinense. Es lo que le costaría al Real Madrid traer al técnico italiano ya porque Conte no está dispuesto a perder ese dineral. El AC MIlan estaba dispuesto a compensar a Conte con una cantidad similar a esos 10 millones de ficha del italiano con el Chelsea, pero el italiano dejó claro a Leonardo que esperaría al Real Madrid. La primera idea de Conte era esperar hasta el próximo verano, ayudar a configurar la plantilla y llegar con todo su staff técnico, entre los que se encuentra Julio Tous, su preparador físico y uno de los artífices del buen estado físico de sus jugadores históricamente.
El enfado de Florentino Pérez tras la ‘manita’ es mayúsculo, pero la decepción con Lopetegui ya venía de lejos. El presidente del Real Madrid sabe que con Solari como entrenador no necesitaba hacer inversiones en el mercado invernal, que el técnico del filial tiraría de Vinicius y Mariano, apostaría no sólo por los jugadores que tras un Mundial largo están ahora bajos de formar sino también por los chavales de la cantera. El perfil Conte es totalmente distinto: tendrá que haber fichajes en el mercado invernal.
Conte tiene muchos puntos en común con José Mourinho. Los dos técnicos necesitan cerrar sus vestuarios y no les importa señalar a lo que ellos consideran ‘manzanas podridas’, se trate de capitanes, jugadores importantes o jugadores franquicia. A Conte le importa mucho más la disciplina que a Mourinho, no soporta el italiano la falta de profesionalidad, que los futbolistas no cuiden su dieta, sus años de sueño, el trabajo físico…. ‘Mou’ disfruta retando a la prensa, Conte prefiere a los periodistas lejos. Los dos son tipos con mucha personalidad. Resultadistas los dos. Justo lo que necesita Florentino Pérez pero justo lo que su capitán Sergio Ramos cree que peores resultados ha dado al Real Madrid en los últimos años. Tomado de Mundo Deportivo.
