Los hallazgos encontrados en el estadio Nacional de Tegucigalpa, bajo el sedimento, bajo ese terreno que se observa verde solamente en televisión, qué contaba con tremendos huecos de «topos», han sido impresionantes.
CONDEPOR con la compañía encargada de la construcción de la grama híbrida, encontró residuos de viajas construcciones en el escenario deportivo.
El relleno que utilizaron para la construcción y montaje del Nacional prácticamente, eran cascajos, piedras basura, escombros de viejas construcciones traídas de quién sabe dónde.
Bajo ese césped verde, no había drenaje, tubería, sistema de riego.. la grama crecía como en cualquier tipo de potrero.
Era necesario descubrir esto… los jugadores caminaban bajo meteoritos, bajo escombros, bajo huesos de dinosaurios.
En 4 meses Honduras contará con una de las canchas mejor preparadas y certificada a nivel mundial, emulando así los grandes escenarios del primer mundo.