Las cosas en el Vida no están fáciles, tienen un presidente muy emotivo, que falta mucho a sus palabras y eso tiene muy molestos a los jugadores del club, que aún siguen esperando cobrar un premió doble que el ofreció por ganar el clásico ceibeño y también están a la espera que le acrediten el mes de septiembre.
Cuando parecía que el Vida había llegado a la solvencia económica que todo club necesita, hoy las cosas han regresado a lo que era antes, el personal administrativo aún no cobra sus salarios y los jugadores se mantienen molestos por la falta de pago, además, el presidente del club, Luis Cruz se ha empeñado más a sus caprichos, que desde la perdida que sufrió ante Potros de Olancho, ha decidido no cancelar el sueldo a los futbolistas y eso los tiene molestos.
Los que más sufren en el Vida por la falta de dinero son los que hacen los trabajos de oficina, a este personal se le adeuda tres meses de salarios, y también no se le ha pagado al cuerpo técnico, esa es la razón por la que han preferido dejar a Junior Izaguirre y no contratar a un entrenador que tenga conocimiento de sobra y la experiencia que se requiere para dirigir un equipo de Primera División.
Otra situación que tiene incómodos a los jugadores, es que el club aún no cancela la renta de los apartamentos en donde ellos viven y varios han sido amenazados de desalojo, ya que los propietarios se han cansado de escuchar la palabra, mañana se paga y ese mañana nunca llega. Además, los jugadores esperan que para los próximos días, el presidente del club les cancele el premio doble que él ofreció por ganar el clásico ceibeño, que por cierto, terminaron derrotando al Victoria 2-1.
De no encontrar respuesta a todo lo que ha prometido Luis Cruz, que es la cancelación de la renta de los apartamentos, el cobro de salarios, más el premio doble que él prometió por ganar el clásico ceibeño, los jugadores ya tiene programado no entrenar el próximo viernes. Como medida de presión.