El juego sobre la mesa en el arranque del repechaje lo comenzó ganando Motagua, luego, ratificó su victoria sobre la cancha de 3-0. Gracias a su mejor aliado, el árbitro del partido, Alex Morazán, quién contribuyó para que el cuadro capitalino obtuviese un resultado abultado ante los Cocoteros.
El rival a vencer por el Vida la noche de ayer no era el Motagua, había uno más fuerte que el equipo capitalino y con mucho poder de decisiones, se trataba del árbitro central, Álex Morazán, quien fue la principal figura para que Motagua se quedara con el triunfo, Morazán traía líneas, así como suele pasar con los árbitros en estás instancias de liguilla.
El objetivo del nombramiento de Álex Morazán, estaba claro, traías los lineamientos y debía proteger al Motagua, para eso fue elegido, y al final terminó haciendo el mejor trabajo, en primera instancia no quiso expulsar a Marcelo Santos por agredir a Anthony García, el defensa motagüense le pegó una patada sin pelota al juvenil volante, Morazán, apenas sacó una tarjeta amarilla, cuando debió ser roja.
Luego, Álex Morazán no podía fallarle a sus amos capitalinos, así que tampoco quiso expulsar en el primer tiempo a Ángel “ Camellito” Delgado, el volante le hizo una entrada violenta al mismo Anthony García, pero Morazán no podía salirse de la línea y no expulsó al jugador motagüense, solo le mostró la tarjeta amarilla, de haber pitado con honestidad y de haber aplicado el reglamento, Motagua se hubiese quedado con nueve jugadores desde el primer tiempo, pero Morazán ya estaba controlado por la mafia que maneja el fútbol hondureño.
