A pesar que Victoria jugó desde el minuto 23 con un hombre menos, los jugadores del equipo ceibeño supieron agruparse sobre la cancha y de esta manera controlaron las jugadas de peligro que el tibio ataque de Motagua intentaba generar en el marco del villano Harold Fonseca.
Cuando parecía que el partido terminaba empatado, Harold Fonseca permitió que el fallido atacante argentino, Franco Olego, anotara el único gol del encuentro y todo se debió a un error garrafal que cometió el ex del Marathón, Motagua y Olimpia.
El partido estába controlado, el empate estaba casi firmado, pero una falta fue cobrada por un jugador de Motagua, el disparo no fue el mejor, la pelota agarró mucha altura, de esas que son las idóneas e indicadas para que un portero salga de su meta, quedarse con la pelota y propiciar un contragolpe, pero Fonseca se quedó estancado bajo el arco, así como suele pasar con él, eso lo aprovechó Carlos Mejía, quien envío un rezago al corazón del área y fue así que Franco Olego, conectó de cabeza para darle la segunda victoria en el torneo al cuadro capitalino, y todo se debió al terrible error que cometió Harold Fonseca en no salir por el balón.