Los árbitros en Honduras son unos desastres, dirigen los partidos con la intención de equivocarse a favor de un equipo, siempre entran a la cancha decididos a incidir en el marcador, ayer quedó reflejado nuevamente cuando Héctor Rodríguez, árbitro del partido que jugó entre Real España y Motagua, no sancionó un penal a favor del cuadro local.
Esa es la realidad, Real España no pasó a la final directamente ante Motagua porque el árbitro del juego, Héctor Rodríguez, así lo quiso, se hizo de la vista gorda al no sancionar como penal una mano del defensa Juan Pablo Montes, eso sucedió en la segunda mitad.
La jugada fue clara, todos presenciaron que la pelota fue cortada por el defensor con su mano, pero el árbitro central tenía todo definido que el equipo que debía pasar a la final del fútbol de Honduras era el Motagua y el objetivo se logró a cabalidad, no sancionó el penal que le permitía al Real España conseguir el empate en ese momento.
Con este error planificado, lo más probable que es Héctor Rodríguez no sea candidato para pitar en lo de falta del campeonato hondureño.