Olimpia ayer tuvo un primer tiempo para el olvido ante Marathón en el primer partido de la gran final del fútbol de Honduras y todo se debió a que parecía que estaba jugando dos jugadores menos sobre la cancha, Alejandro Reyes y Javier Portillo eran los problemas a los intereses del Albo.
Mientras los dos jugadores se mantenía sobre la cancha, Olimpia nunca encontró su juego, Alejandro no encajó en el medio campo y Portillo, fiel a su estilo, nunca dio salida y perdió todas las pelotas que disputó ante Marlon «Machuca» Ramírez, quien volvió a hacer fiesta cada vez que encaraba al veterano lateral izquierdo, quien no vio ninguna ante el jugador del Marathón.
Alejandro Reyes, jugó de titular ante Marathón, nunca encajó y debió abandonarla cancha. A partir de ahí, Olimpia jugó a ganar.
Olimpia no se vio en el primer tiempo y todo se debió a que Alejandro nunca se dio cuenta que estaba sobre la cancha y Portillo, tampoco fue útil en nada, todo mejoró cuando Pedro Troglio decidió sacar a ambos futbolistas de la cancha, una vez reemplazados, el Albo se conjuntó mejor, por la izquierda se vino el primer gol del partido, gracias a un buen centro que envío Samuel Córdova, quien había entrado a la cancha por el frágil y vulnerable Portillo.
Como trapo viejo, así agarró Marlon Ramírez a Javier Portillo la noche de ayer, Olimpia recuperó su juego cuando el jugador salió de la cancha.
Mientras Alejandro Reyes se mantenía sobre la cancha, Olimpia no generó ningún problema en ataque, además, por el lado de Javier Portillo se generaban las jugadas de peligro del Marathón. El Albo fue otro equipo cuando ambos futbolistas fueron reemplazados por el técnico argentino. Sólo así dejaron de seguir siendo un atentado para Olimpia
