Es un partido de clásico y los clásicos en todas los los países del mundo son difíciles y complicados, son sus principales características, la rivalidad está al frente, en estos partidos se juegan muchas cosas, prestigio, honor, respeto, dignidad. Una victoria te permite caminar con la cabeza al frente, una derrota te mantiene encerrado en casa.
Olimpia y Motagua juegan en esta noche, ambos clubes abren el camino para llegar a la final del fútbol hondureño, se verán la cara en el primer partido de la semifinal en el estadio Nacional de Tegucigalpa, solo que en esta ocasión, se jugará un clásico con cierta ventaja para un equipo y es para Motagua, el cuadro de Diego Vásquez, jugará con el factor cansancio que ha acumulado Olimpia por estar jugando un partido oficial cada tres días. Además, futbolísticamente, Motagua ha demostrado tener un mejor nivel de juego que su rrival, quedó reflejado ante Marathón.
Motagua tiene ventajas, es la verdad, el equipo azul llega con menos esfuerzos físicos para enfrentar a Olimpia, apenas cumplirá su tercer partido de manera seguidas, mientras que Olimpia, jugará su quinto partido, han sido las razones por las que sus jugadores han demostrado cansancio y para está noche no será nada diferente, jugará ante un Motagua que buscará meter mucha velocidad y juego rápido en todos los sectores de la cancha y de esta manera sacar ventaja a la fatiga física que cargan los jugadores del Albo.