La prueba antidoping no solamente debe de ser para los futbolistas, también hay que praticarselas a los directivos y cuerpo técnico de los equipos, a todos los involucrados, con las desiciones que por ratos toman, se puede pensar que no actuan sobrios ni con los cinco sentidos trabajando a la naturalidad.
Las desiciones que están tomando en Motagua por ratos son irrisorias, fuera de norte, sin sentido, la apuesta es la nueva reestructuración que pretenden hacer, separan al atacante catracho, Erick Andino, el delantero que tocó la gloria con el equipo y logró ganar varios campeonatos y en su lugar dejan al argentino, Gonzalo Klusener, el delantero de 37 años de edad, por el que Motagua tuvo que pagar una alta cantidad de dólares por su traspaso y poder llegar al equipo.
Las diferencias.
Andino fue un jugador rentable para el equipo, jugó 115 partidos oficiales y logró anotar 40 goles, además, mientras se mantuvo en la institución, el delantero rindió, eso le valió ser parte del proceso eliminatorio para el Mundial de Rusia, la realidad de todo, es que Andino Portillo, demostró eficiencia mientras estuvo en Motagua, ha quedado fuera del equipo y en su lugar mantienen blindado y con posibilidades de renovar contrato a Gonzalo Klusener, un veterano futbolista que llegó en enero con 36 años al Motagua.
Gonzalo Klusener, es el futuro en la delantera de Motagua, el atacante tiene 37 años de edad y piensan renovarlo.
La separación de Andino
El delantero desde la temporada ya tenía los días contados en el equipo, antes de la lesión de su tobillo, las intenciones de Diego Vásquez era separarlo, incluso, en varias ocasiones, el argentino quiso enviar a préstamo al atacante, algo que no aceptó y eso irrito a Vásquez, quien esperó paciente para poder separar del plantel al futbolista catracho, quien sale del equipo con 31 años de edad y Gonzalo Klusener se mantiene con 37 años y se convierte en una solución para el futuro en el ataque de Motagua.
¿Con quién se queda usted, con Klusener o Andino?