Tegucigalpa – La fiesta del fútbol estaba programada para disputarse el sábado 17 de agosto del 2019 a partir de las 7:30 de la noche, Motagua y Olimpia serían los protagonistas del denominado clásico capitalino.
Durante la semana la Policía Nacional se reunió con dirigentes de ambos clubes para desarrollar un plan estratégico basado en la seguridad que tendrían los aficionados que asistirían a ver el Olimpia frente al Motagua.
El Motagua de Diego Vázquez, actual campeón del fútbol hondureño, llegaba con la ardua tarea de frenar a un renovado Olimpia, dirigido por el ex mundialista con la Selección de Argentina Pedro Troglio.
Pero a falta de una hora y 30 minutos para que iniciará el clásico en el viejo estadio nacional, una turba atacó el autobús en que se trasladaba el club deportivo Motagua dejando como resultado 3 jugadores lesionados.
Emilio Izaguirre, el argentino Jonathan Rougier y el paraguayo Roberto Moreira, estaban entre los jugadores afectados producto del ataque de parte de aficionados, que aparentemente serían de la barra del club Olimpia la Ultra Fiel.
Tras el incidente autoridades del club deportivo Motagua decidieron retornar al hotel de concentración y buscar asistencia para sus jugadores afectados por el ataque. Mientras tanto en otro sector de la capital, autoridades del Hospital escuela informaban que 3 personas y más de 7 heridos habían ingresado a la sala de emergencia del centro asistencial.
La Policía Nacional
La Policía Nacional, a través su vocero Jair Meza, manifestó que los disturbios ocurridos la noche del sábado en el Estadio Nacional, donde fallecieron cuatro personas, demuestran la saña y el odio que se tienen los aficionados al fútbol.
“Los atacaron con piedra y se ve la saña y el odio que tienen estas personas por el fútbol”, dijo el funcionario policial.
Explicó que el origen del caos que se produjo fue el ataque con piedras y botellas por parte de simpatizantes del Olimpia al bus donde se transportaba el Motagua en el barrio Los Jucos.
Respecto al hecho, Meza admitió que fue un ataque sorpresivo debido a que el bus venía con seguridad policial.
“El bus de Motagua fue atacado de una forma inesperada fuera de los anillos de seguridad que estaba en los alrededores del Estadio”, justificó.
Las víctimas fueron identificadas como Jefersson Banegas de 24 años de edad, David Antonio Zepeda (22), Carlos Fernando Alvarado (26) y Belis Antonio Baquedano (27).
Guerra campal
Afuera se desarrollaba una guerra campal entre autoridades policiales y aficionados del Olimpia cómo del Motagua. Pese a lo que estaba pasando el club deportivo Olimpia tuvo el descaro de mandar a sus jugadores al centro de la cancha para hacerlos respectivos calentamientos.
Mientras los jugadores del Motagua estaban siendo atendidos en un centro asistencial privado de la capital ni siquiera lograron llegar porque el ataque se produjo a inmediaciones del estadio birichiche pese a los cinco anillos de seguridad qué dijo: estarían listos la Policía Nacional.
Olimpia y Motagua
La situación se salió de control en el interior del estadio nacional unas 15000 personas esperaban el espectáculo deportivo pero el descontrol se fortaleció producto de los gases lacrimógenos lanzados por la Policía Nacional y con eso se generó el pánico en la instalación deportiva.
Pedro Atala presidente del Motagua condenó la acción y pidió castigo para los responsables, como también sanciones para el club deportivo Olimpia.
Y Diego Vázquez como siempre insensible a la realidad que vive el país, no se pronunció ni siquiera por los muertos y las personas afectadas producto de la violencia, sino que básicamente se limitó a decir que Motagua debería ganar los tres puntos.