Tegucigalpa – Fueron 10 minutos. Suficientes para que la afición del Betis se ilusione con un nuevo ídolo. Diego Lainez debutó con la camiseta verdiblanca ante el Girona dejando buenas sensaciones y demostrando que tiene algo que hizo que el club español apostase por el mexicano en este mercado invernal.
Fue un estreno triunfal, con esa victoria en el último penalti con el penalti transformado por Sergio Canales. Desde el momento en el que salió a calentar, Lainez recibió el calor de su nueva afición. Una gran ovación también le acompañó en el momento de saltar a la cancha, en sustitución de Loren.
En esos últimos minutos, Lainez no se escondió. Pidió la pelota en todo momento, intentó encarar a sus rivales y también se enfadó cuando no le pasaban alguna pelota mostrando el carácter que esconde en sus 167 centímetros de estatura.
El idilio de Lainez y el Betis no ha hecho más que empezar. Esperan muchos más capítulos de este talento mexicano que en el Betis están deseando ver en los próximos partidos.
