El técnico argentino explicó ya hace algunas semanas la situación con el futbolista malagueño al presidente Florentino Pérez, que le mostró su apoyó sin ningún tipo de condicionantes.
Tegucigalpa – Solari no se ha tirado al vacío con su decisión de relegar a un papel secundario a Isco. Desde la llegada del técnico argentino al banquillo del Madrid, el malagueño sólo ha sido titular en tres de 18 partidos que ha dirigido el técnico a la primera plantilla.
Prácticamente, los tres duelos fueron intrascendentes: la vuelta de Copa del Rey contra el Melilla y la última jornada de Champions ante el CSKA. La última vez que fue titular fue en la vuelta de los octavos de la Copa ante el Leganés. Fue la primera titularidad del malagueño lejos del Bernabéu con el argentino.
Solari ha decidido que Isco no le encaja en su esquema de juego, a pesar de que reconoció públicamente que era un jugador que le encantaba. Solari quiere verticalidad y posesiones cortas, mientras Isco es un jugador de pausa y conducción. A esa incompatibilidad de concepto futbolístico, se unen supuestos desplantes que el malagueño le habría hecho al entrenador (y a su cuerpo técnico) en varias ocasiones.
Con este panorama, Solari se ha llenado de argumentos para justificar el ostracismo en el que se encuentra Isco. De todo ello, ha sido informado hace semanas Florentino Pérez, que respalda al técnico. Así que Solari ya sabe desde hace semanas que tiene el apoyo presidencial para mantener el pulso con Isco hasta que éste decida adaptarse al estilo de juego que le exige y mejore su estado de forma, otro de los puntos claves para explicar su ostracismo.
En cualquier caso, en el club tienen decidido que Isco será uno de los jugadores con los que intentarán hacer caja para financiar la revolución que precisa el equipo para seguir siendo competitivo al máximo nivel los próximos años. Hazard, Eriksen, Kane… son algunos de los refuerzos que el Madrid tiene en cartera y para poder afrontarlos precisa la venta de un activo importante como el malagueño.