Danilo Petrucci –el piloto que sustituirá a Jorge Lorenzo en Ducati el año que viene-, ha explicado aquí en Buriram cómo en las dos semanas entre el GP de Aragón y este de Tailandia, los ingenieros del Reparto Corse han analizado a fondo todos sus datos de la temporada para “entender” de qué manera pilota y, sobre todo, averiguar qué hace que las segundas partes de carrera de su futuro piloto sean su Talón de Aquiles.
“Yo siempre he achacado este problema a mi exceso de peso comparado con la mayoría de los pilotos de MotoGP, pero han detectado que eso sólo influye en un 30% de la bajada de rendimiento, el otro 70% es mi forma de pilotar. Mi defecto es que hago la segunda mitad de las curvas demasiado rápido, lo que por un lado me lleva a hacer trazadas muy abiertas en la salida y por otro a forzar mucho el flanco de los neumáticos”.
En Motorland, por ejemplo, el neumático delantero de Danilo llegó a alcanzar los 130º cuando la temperatura normal es de alrededor de 100º. “Dovizioso en cambio, para la moto cuando está recta. Con lo que no castiga tanto el los neumáticos y además hace las rectas para él sean más largas”. ¿Y cuáles son los puntos fuertes de las Ducati? La frenada y la aceleración… Simple, ¿no?
No es elegante hacer leña del árbol caído, pero es inevitable hablar de la crisis de Yamaha, especialmente después del desánimo mostrado por sus pilotos en sus ruedas de prensa el jueves aquí en Buriram, Tailandia. Una crisis que afecta tanto a la parte técnica como a la de gestión. Escuchando a Rossi y Maverick, el mensaje que llega es que los ingenieros no saben qué está pasando; mientras que por otro lado el malestar/desaliento parece instalado en las filas del Team Yamaha. Una situación que no debe resultarles tan extraña, ya que hace 15 años estaban en una tesitura parecida.
El recientemente estrenado proyecto de MotoGP había nacido “defectuoso”. La M1 se mostraba incapaz de medirse con las MotoGP de Honda e incluso Ducati. Estamos hablando de 2003, cuando, para solucionar una situación que se había enquistado, la alta dirección de Yamaha Motor Cº decide recurrir a uno de los ingenieros más brillantes del compañía que no había visto una moto de carreras en su vida: Masao Furusawa.
Desembarcó el 1 de junio de 2003 en la División de Carreras de Yamaha, reorganizándola de arriba abajo. El 1 de octubre de 2003 fichó de la Automotive Division a Kouichi Tsuji, el ingeniero responsable de los motores Yamaha de F1 … Yamaha ganaría con Valentino Rossi el Mundial 2004 y pasó a ser la referencia del campeonato ganando, conquistando el titulo en 2003, 2004, 2005, 2008, 2009, 2010 y 2012.
Se supone que en un deporte en el que los resultados se obtienen en función del rendimiento de uno mismo –es decir, no siendo parte de un equipo-, basta con ser mejor que los demás para tener éxito. Pues no, no es así, como en los deportes colectivos, en el motociclismo no basta con ser el mejor. Un buen ejemplo de ello es Andrea Iannone. Los que han trabajado y han tenido acceso a su telemetría se asombran de lo que es capaz de sobre la moto.
“Es uno de los tres pilotos con más talento de MotoGP”, nos decía un técnico. “Las cosas que le veo hacer en los datos son increíbles, pero…”. Ese “pero” básicamente refleja la trayectoria del piloto de Vasto: dos años en el equipo de fábrica de Ducati, dos años en el equipo de fábrica de Suzuki, desde donde pasará a final de temporada al de Aprilia… Siendo como es un auténtico fuera de serie dándole al gas.
Y es que en el motociclismo, especialmente en la mega élite que es MotoGP, la gestión de uno mismo es tan importante como la capacidad de ir deprisa o el nivel técnico de la moto. No entenderlo o no darle valor hace que el talento de pilotos excepcionales acabe perdiéndose agua abajo; y eso es una pena. TOMADA DE MUNDO DEPORTIVO