El portero del Tottenham, Hugo Lloris, ha sido declarado culpable este miércoles por un tribunal británico por conducir bebido el pasado 24 de agosto en Londres. Además, el arquero galo ha sido multado con 50.000 libras (56.000 euros) y 20 meses sin poder conducir.
El portero de 31 años fue arrestado de madrugada por la policía en la zona de Marylebone, en el centro de la capital británica, tras dar positivo en un control de alcoholemia, y fue llevado a la comisaría de Charing Cross, antes de su puesta en libertad bajo fianza.
Lloris admitió ante el tribunal que había duplicado la tasa de alcohol permitida cuando fue parado por los agentes de la policía, que le sometieron al test. La prueba de alcoholemia reveló 80 microgramos de alcohol por cada 100 mililitros de aliento, es decir, más del doble del límite permitido en Inglaterra, que se sitúa en los 35 microgramos.
Cuando la policía paró el vehículo, encontró vómito dentro de él y tuvo que ayudar a Lloris a salir del mismo.
El guardameta francés llegó al Tottenham en el verano de 2012 procedente del Olympique de Lyon y, en sus seis años en el norte de Londres, ha defendido la camiseta de los ‘Spurs‘ en 256 ocasiones. MD.