Para que en el fútbol de Honduras, los técnicos nacionales se destaquen, primero deben de quemarse las pestañas estudiando, tener títulos universitarios y para tener otras perspectivas sobre el manejo de grupo y tener un conocimiento en este deporte, como es el caso de Humberto Rivera, quien antes de involucrarse al fútbol, le dedicó muchos años a las aulas de clases, caso contrario con los extranjeros, estos apenas saben leer y escribir, cosas que son suficientes para los dirigir equipos grandes en el país.
Para la final del Torneo de Clausura del fútbol catracho, la final será dirigirá por dos técnicos con perspectivas diferentes sobre la educación y el conocimiento, por el lado de Potros de Olancho, estará en el banquillo, Humberto Rivera, un técnico hondureño que le apostó a los estudios, es un docente que tiene más de 25 años impartiendo clases en Educación Media y en el nivel superior, eso quiere decir que es un especialista en transformar sociedades, caso contrario al técnico de Olimpia, quien apenas ha dedicado tiempo para leer un libro.
Los dos técnicos viven dos mundos diferentes, el técnico de Potros de Olancho, es sinónimo de conocimiento en temas de educación, mientras que Pedro Troglio, no deja de contar anécdotas y chistes que hacen reír a sus jugadores, creer en cábalas, cosas básicas que le han dado resultados en los últimos años, ya que ha ganado varios campeonatos con Olimpia, solo que en esta ocasión, el fútbol de Honduras ha dado un giro, la final la ganará un equipo que es dirigido por un profesional de Educación Superior y otro que no pasa de contar chistes y anécdotas a sus jugadores, es el caso del argentino Pedro Troglio, quien no recuerda cuando fue la última vez que estuvo sentado en una aula universitaria.
