El jugador que si la ha sabido hacer en los últimos años, es el volante medio creativo que tiene Motagua, Cristian “Colocho” Martinez, el futbolista se la ha llevado relajado en el equipo, ya que ha logrado engañar a los directivos del club, quienes aún siguen esperando a que el jugador sea una solución para el equipo capitalino.
Walter Martinez, llegó al Motagua en el año 2017, antes estába jugando en el Marathón de San Pedro Sula, han pasado exactamente cinco años desde que llegó al cuadro capitalino y no ha hecho otra casa en la cancha que jugar para la afición, pasarse sobre el balón, dar pases cortos, hacer fintas tontas e improductivas, practicar un fútbol fácil de controlar por el rival, solo que ha sido suficiente para que los directivos lo hayan protegido en todos estos años, ya que lo consideran el volante que siempre han soñado tener.
Son varias temporadas que el volante ofensivo tiene de estar jugando con Motagua y en ninguna se ha podido consagrar, es un futbolista que ha gozado de todas las oportunidades posibles de parte del entrenador de equipo, Martínez ha demostrado ser un improductivo de primer nivel, no pasa de hacer jugadas que deleite a la afición, no tiene gol, no tiene disparo a la meta, tiene miedo pisar el área rival, no habilita a los delanteros, tampoco es útil a la hora recuperar el balón, su fuerte en la cancha es pararse sobre la pelota y luego cubrirla, de pronto, cuando el rival da muchas ventajas, él aparece para hacer una jugada de peligro, de lo contrario, el rendimiento de Walter Martinez es más normal de lo habitual, un jugador que se ha quedado en deuda vistiendo la camisa Motagua, con la fortuna que tiene de fanáticos a los altos directivos del club, que se han vuelto ciego con el fútbol improductivo que práctica el volante.
Martínez se ha caracterizado por anotar dos o menos goles por torneos, ha jugado más de 100 partidos con Motagua y no pasa de anotar 15 goles, y un bajo número en asistencias a los delanteros.