El nivel más bajo y ordinario que pudo caer Lobos UPN en el fútbol hondureño, lo ha logrado con Héctor Castellón, como técnico del equipo universitario, ayer cosechó su sexta derrota en el campeonato y eso lo mantiene hundido en la última posición con la Real Sociedad de Tocoa.
La situación de Lobos UPN es preocupante, el equipo de Héctor Castellón se ha olvidado de jugar un fútbol de alto rendimiento, no tienen jugadores que culminen las últimas jugadas en la portería del rival, ni Kilmar Peña, ni Jairo Rochez han podido hacer el trabajo que deben de hacer los delanteros, el ataque del equipo universitario es vago e indefenso, los números hablan por si solo y el técnico no ha podido resolver el problema que el mismo se ha creado.
Hasta los momentos, el cargo de Héctor Castellón está en las manos de los directivos, de ellos depende que el técnico se mantenga al frente del equipo, los números lo tienen aplazado, de todos aquellos que han dirigido a Lobos, Castellón es el único que ha llevado a lo más bajo al cuadro universitario, aún no le ha encontrado la fórmula, un día juega con dos delanteros, otro día solamente utiliza a uno en ataque, hace muchas improvisaciones con sus jugadores, es tan cruel la realidad del técnico nacional, que de 21 puntos que se ha disputado, apenas tiene tres. Números catastróficos para ser separado de su cargo en las próximas horas.
