Una noche de terror fue la que tuvieron los futbolistas del Victoria. Kenneth Hernández, Arnaldo Urbina y Harold Fonseca, los tres jugadores no estuvieron a la altura de un partido profesional y se dedicaron a cometer errores que a la larga jugaron en contra de los objetivos del cuadro ceibeño.
Los tres fútbolista fueron los villanos del equipo, ante el Honduras Progreso no estuvieron a la altura, jugaron en contra de su propio equipo, el caso de Kenneth Hernández, no parecía ser defensa central, fue superado por todos los atacantes que lo enfrentaron, perdió en el uno contra uno, se vió muy vago y vulnerable ante el rival, fue un incapaz dentro de la cancha, no generó seguridad y nunca fue una garantía para el equipo, lo sacaron por eso mismo, por mostrar un nivel muy bajo de lo normal.
Otro jugador que anduvo perdido y desconectado fue Arnaldo Urbina, el lateral izquierdo se olvidó de manejar su zona, por ahí se entraba con el mínimo esfuerzo, el primer gol del Honduras Progreso fue un error de él, Cristian Sacaza le ganó una pelota, lo superó en velocidad para luego habilitar a Erick Andino, y cuando se trató de atacar, tampoco apareció, el futbolista no abonó en nada, en la marca fue un debilucho y en ataque un ciego.
Harold Fonseca no se queda atrás, regaló el segundo gol del partido, por su culpa el Victoria perdió el encuentro, no salió a cortar una pelota que venía por los cielos, se quedó estancado en su meta, el balón bajó en el área chica y Erick Andino, anotó el segundo gol de la noche, lo que significó el triunfo para los ribereños. Y la segunda derrota de los jaibos.