La salida de Diego Vázquez no será nada fácil, que los directivos tomen una decisión de separar al técnico argentino, está más complicado que nunca, el poder que tiene el entrenador ha cruzado todos los límites del fútbol hondureño.
Los ocho años que tiene el argentino al frente de Motagua le permitió tener un poder que no tiene límites, Diego Vázquez se encarga de negociar los contratos con los jugadores que él quiere en el equipo, tiene la facultad de llamar a los futbolistas y ofrecer una cantidad de dinero que él cree que es lo que debe de ganar mensualmente, ya no es necesario que un directivo haga las negociaciones con los futbolista que interesen al club, de eso se encarga Diego Vázquez, quiere decir que si el jugador era del agrado del técnico, el contrato que era bueno.
Eso mismo fue lo que pasó con Carlos Bernardez, el ex delantero del Platense recibió una llamada de Diego Vázquez que fichar con Motagua, pero no le pareció el sueldo mensual que el técnico le ofreció, por esa razón prefirió fichar con el Real España, es de recalcar que cuando un técnico se pone a negociar los contratos de los jugadores, tiende a cobrar comisiones para llevar a cabo el fichaje el fichaje.