Jugar relajado se puede hacer, no más cuando el técnico te permite ciertos juegos en algunos entrenamientos, es ahí en donde se vale hacer inventos para reírte un rato del compañero, pero eso se acaba una vez que ya estás en competencia, Diego Rodríguez lo olvidó ante los Estados Unidos y al final terminó regalando el tercer gol de la noche.
Mientras el lateral izquierdo se mantuvo firme en el partido, su rendimiento era más que aceptable, se proyectaba al ataque, sacaba provecho de los espacios que dejaban los jugadores estadunidenses, gracias a un centro que sacó de pierna izquierda, Bryan Moya, anotó el único gol de Honduras, luego, Rodríguez mantuvo el nivel a la altura, incluso, pudo colaborar en la segunda anotación del cuadro hondureño, pero Jonathan Rubio prefirió disparar a la meta en vez de sederle el balón al futbolista cuando se desplazaba solo por la izquierda.
Villano.
En la segunda mitad, Diego Rodríguez acabó con las las esperanzas de Honduras para buscar empatar el partido, se jugaba el minuto 78 del segundo tiempo, el cuadro catracho ya perdía 2-1, Rodríguez tenía una pelota controlada, quiso entregarla un compañero con pase de lujo, fue interceptado por el rival, en el rebote del balón, le volvió a caer al futbolista hondureño, quien se dejó arrebatar la pelota y de esta manera y en una jugada rápida por parte del atacante de los Estados Unidos, cayó el tercer tanto del partido, acabando con todas las esperanzas de los catrachos, gracias a un grave error de Diego Rodríguez.
