Hay jugadores de fútbol que son buenos, esos que se han ganado las cosas por medio del trabajo, del sacrificio y la paciencia, esos siempre llegarán muy lejos, hay otros que se creen ser muy buenos, de esos siempre han habido de sobras en el fútbol hondureño, esos mismos que se creen superiores a los de más sin demostrarlo sobre la cancha, esos vagos que manipulan entrenadores, esos ordinarios y mal formados que se atreven a romper un cambio, así como lo hizo Carlos “Mango” Sánchez, el mejor lateral izquierdo de todos los tiempos en Honduras, bueno, según él.
Después que Ramón “Primitivo” Maradiaga, abandonara el Vida por problemas con un directivo, una vez que el laureado técnico hondureño salió del equipo Cocotero, Carlos Sánchez se ha dedicado a hacer lo mismo que hacía en el Honduras Progreso, manipular a los entrenadores, lo hizo de inmediato con Nerlin Membreño, hasta obligarlo a renunciar de su cargo, hoy, fiel a estilo, también utiliza la labia para jugar con el técnico portugués, Fernando Mira, a quien le ha faltado mucha personalidad hacia el jugador.
Sánchez, quien tiene antecedentes desagradables en el Vida, cuando Nerlin Membreño era el entrenador, en un partido que se estaba jugando en La Ceiba, el técnico catracho decidió sacarlo de la cancha, el lateral izquierdo no quiso salir y el cambio se suspendió, en un partido que Vida jugó ante Lobos UPN en el estadio Marcelo Tinoco de Danlí, Fernando Mira tenía el cambio listo y cuando Sánchez se dió cuenta que el que iba a salir era él, logró agarrar el papel y lo rompió, creando un malestar entre sus compañeros, en aquella ocasión, el equipo capitalino terminó ganando 3-1. Con dos errores del futbolista.
Para esta temporada, el objetivo era que el juvenil Michael Rosales fuera el titular, pero el joven futbolista tiene una lesión que no le ha permitido entrenarse de la mejor manera.