La maldad está en todos los sectores, el odio ha llegado al fútbol, por no decir, se ha mantenido, es el caso vívido por el defensa de Motagua, Clifox Bernardez, quién tuvo que regresar al equipo a causa de ser amenazado y chantajeado por la directiva del cuadro capitalino
Después de ser dado de baja por la directiva, el lateral izquierdo quedó a la deriva, sin contrato y en busca de una oportunidad en algún equipo de Honduras, es de recordar, que la pandemia del Covid-19 ha reducido el espacio para los futbolistas en el país, sabiendo de la capacidad y el talento de Clifox Bernardez, el Vida de La Ceiba, el equipo que comanda “Primitivo” Maradiaga, Nerlin Membreño y Jairo Martínez, le hizo una oferta al jugador, una oferta que llenó sus expectativas, además, la titularidad la tenía garantizada en el equipo, todo estaba arreglado, pero al filtrarse la información que el rápido lateral iba a fichar en el cuadro ceibeño, las cosas cambiaron, Clifox fue chantajeado y amenazado, recibió un dinero, una ayuda del equipo en plena pandemia, fue de esa manera que se vio obligado a regresar a Motagua, que por cierto no tendrá oportunidad de jugar con Omar Elvir y Emilio Izaguirre, Quien ya fue renovado por la directiva.
Juan Carlos Suazo, presionó y amenazó a Clifox Bernardez para no fichar con Vida y regresar a Motagua.
Chantajes y amenazas.
En plena pandemia de Covid-19, Motagua le dio un ayuda de 24 mil lempiras al futbolista y de eso se agarraron para obligarlo a firmar contrato con el equipo, es de entero crédito que Bernardez quería fichar para Vida y ser entrenado por el mejor técnico del país, solo que una vez enterados que el futbolista ya tenía todo arreglado con el equipo ceibeño, comenzó a recibir llamadas de parte del presidente administrativo, Juan Carlos Suazo y de Diego Vásquez, el técnico que había dado la orden de separar del equipo al lateral izquierdo.
Se disculpó con el Vida.
Una vez presionado por ambas personas y amenazado por el dinero que recibió de ayuda para cubrir ciertas necesidades económicas en plena pandemia de Covid-19. Bernardez no tuvo otra opción que regresar a Motagua de manera obligada, no más tuvo tiempo de pedir disculpas a la gente del equipo ceibeño. Es de mencionar que Vida le había ofrecido la titularidad al lateral izquierdo y en Motagua, será un milagro que el futbolista consiga adueñarse del puesto mientras se mantengan Omar Elvir y Emilio Izaguirre.
Diego Vásquez, había separado al futbolista, pero al darse cuenta que sería dirigido por Ramón Maradiaga, por medio de chantajes y amanazas hizo que el jugador regrese al equipo.
Por otra parte, Clifox Bernardez no podía fichar con Vida, al equipo ceibeño lo dirige Ramón Maradiaga y el técnico nacional es odiado por Diego Vásquez y con Juan Carlos Suazo no hay buena relación, es de recordar que fue “Primitivo” Maradiaga el que le dio oportunidad en el fútbol de Honduras a Diego Vásquez y ahora lo que recibe del argentino es odio.
¿Es correcto que Motagua actuará de esta manera con Clifox Bernardez?
