El Al-Sadd de Xavi Hernández no pudo alcanzar las semifinales del Mundial de Clubes tras caer derrotado ante el Monterrey (3-2) en un entretenido duelo en Doha. Vangioni y Funes Mori encarrilaron el duelo para los mexicanos antes de que Bounedjah ilusionara a los cataríes. Sin embargo Carlos Rodríguez sentenció el duelo y Hassan maquilló el marcador al final. Los de Antonio Mohamed, extécnico del Celta entre otros, se las verán el próximo miércoles 18 ante el Liverpool.
Los Rayados superaron claramente al conjunto catarí en la primera mitad. Gallardo avisó con un disparo al larguero en los primeros compases poco antes de que Pabón exigiera a Al Sheeb con un disparo centrado pero potente. Fue la antesala del espectacular tanto de Vangioni. El lateral zurdo de los mexicanos atizó un zurriagazo desde más de veinticinco metros que limpió las telarañas de la portería de Al Sheeb.
Los pupilos de Xavi, que no se encontraban nada cómos sobre el verde, encajaron otro duro varapalo antes del descanso. Error garrafal de Gabi en un pase atrás y Rogelio Funes Mori no falló solo ante el portero. Fallo imperdonable de un futbolista de la talla del excapitán del Atlético de Madrid.
A pesar de que Afif tuvo la réplica en la última acción de la primera mitad, los futbolistas de Antonio Mohamed estaban dominando los tempos del partido. Así, en la reanudación Pabón gozó de dos claras acciones para sentenciar el duelo, pero no estuvo certero en sus remates. Eso dio aire a un Al-Sadd que empezó a creer poco a poco en sus posibilidades. Afif volvió a perdonar aunque a renglón seguido Bounedjah sí pudo recortar distancias con un gran testarazo tras una recuperación de Ró-Ró.
No obstante, el lateral diestro del Al-Sadd pasó de héroe a villano en apenas diez minutos, pues una pérdida suya originó el 3-1 del Monterrey. Carlos Rodríguez fusiló en el área y acabó con las esperanzas de los de Xavi. Un latigazo de Abdelkarim Hassan desde la frontal del área maquilló el resultado en el 90’. A pesar de que el árbitro descontó seis minutos, no hubo milagro.