Héctor Romero es un jugador nuevo en el fútbol para Amputados en Tegucigalpa, apenas tiene menos de seis meses y le ha sabido entender al trámite, se le nota buena técnica, eso indica que antes de perder la mano disfrutaba jugar fútbol, como portero del equipo Conamiredis, ha demostrado ser de gran ayuda, transmite seguridad en la cancha, ayer lo demostró al detener dos penales en la final de la triangular ante Guererros, y de esta manera guiar a su equipo a su primer campeonato en esta modalidad en Tegucigalpa en Honduras.
Romero ha sabido aprovechar el tiempo, no ha esperado tanto para convencer a todos y ser convocado a la Selección Nacional de Fútbol de Honduras para Amputados, se ha ganado la confianza del entrenador, además, con el rendimiento que demostró en su primera participación en esta modalidad, el portero será una garantía cuando defienda la meta de ambos equipo, tanto Conamiredis y la selección nacional.
Héctor Romero no olvida la manera de como perdió la mano izquierda. “Eso fue en un accidente automovilístico, en el año 2012, estube tres meses y medio en el hospital Escuela, me construyeron la mano con cuatro platinas, 16 clavos Y 23 tornillos, por las huelgas que había en el hospital, mi mano agarró varias infecciones, definitivamente no tenía salvación y desgraciadamente perdí mi mano”. Contó el portero amputado.