Las cosas cambiaron en Motagua, el poder que tenía el técnico argentino, Diego Vasquez, ha llegado a su final, la directiva del cuadro capitalino está molesta, ya que el entrenador autorizó el fichaje de Rubilio Castillo, sabiendo que tiene una lesión crónica.
El poder que tenía el técnico argentino, ha disminuido, él ya no hace las negociaciones con los jugadores para firmar contrato, tampoco tiene la potestad de seguir contratando futbolistas de ligas no profesionales de argentina, a los cuales les cobraba coimas para ser fichados por Motagua, la directiva se ha molestado con el técnico coimero, quien dió el visto bueno para la contratación del atacante Rubilio Castillo, sabiendo que tiene una grave lesión en una de sus rodillas.
La directiva del club, está trabajando en la rescisión del contrato del atacante, ya que se le ha descubierto que necesita una cirugía en una de sus rodillas, que lo mantendrá por varios meses fuera de la cancha. Por lo tanto le desbarata el primer negocio al deshonesto Diego Vásquez.