Mientras Héctor Castellón era el técnico de Lobos UPN, varios jugadores juveniles que estaban destacando en el Torneo de Reservas, fueron enviados al baúl del recuerdo, no tenían oportunidades en el primer equipo, ya que Castellón es de esos entrenadores que se enamoran de los jugadores, por esa razón, Justin Ponce no fue tomado en cuenta, a pesar de haberse convertido en el mejor futbolista en la categoría de reservas, lo demostró en todos los partidos, hoy, con la llegada de Ramón Maradiaga le ha favorecido.
Ponce, de 17 años de edad, es todo un talento, el volante tiene todas las condiciones para destacarse en el fútbol nacional, debutó en la Primera División con Raúl Cáceres, con apenas 15 los de edad, fue un debut amargo, ingresó a la cancha y luego fue expulsado del partido, fueron pocos los minutos que estuvo sobre el terreno de juego, la ansiedad y el nerviosismo le jugaron en contra, después, pasó todo el año jugando a buen nivel en el Torneo de Reservas, mostrando una mentalidad fuerte, ya que nunca bajó los brazos, por falta de una oportunidad en el primer equipo, a pesar que estaba haciendo méritos de sobra, el nivel con que jugaba los encuentros en dicho torneo, demostraba ser superior a sus compañeros y a sus rivales
Con la llegada de Ramón Maradiaga al frente de Lobos UPN, sucedió lo que se esperaba con Justin Ponce, el técnico nacional le ha dado la oportunidad y el juvenil volante no ha defraudado, además, es un jugador que confía en su talento y en sus condiciones, lo demostró ante el Vida y ayer ante el Victoria, el diminuto futbolista fue uno de los más destacados dentro del terreno de juego, se le vió mucha movilidad, supo darle un buen trato al balón, la técnica que posee es envidiable, condujo la pelota a alta velocidad, eso lo hace de la mejor manera, también se encargó de tirar los tiros de esquinas, ya que posee un buen toque de pelota, otras de las cualidades que demostró tener Ponce en los partidos de reservas, es el buen disparo de corta y larga distancia, ya que anotó varios goles.