Miguel Falero fue un bárbaro con su alineación ante la selección Sub-23 de Rumanía, el técnico uruguayo, fiel a su estilo y siguiendo lineamientos, decidió enviar a un Olimpia reforzado ante el equipo europeo, que por cierto, derrotó 1-0 al equipo catracho en su debut en los Juegos Olímpicos de Tokio.
La selección catracha perdió en su debut ante los europeos, la sorpresa para todos fue la tremenda locura del entrenador uruguayo en enviar a la cancha a siete jugadores de Olimpia, quedando todos ellos en deuda, ya que el único que tuvo un nivel alto fue el defensa central, José García, este controló con mucha facilidad a los atacantes rumanos, también se impuso en el juego aéreo, fue una garantía dentro de la cancha, caso contrario a sus demás compañeros, hoy, los jugadores del Albo quedaron en deuda y han defraudado a todos.
Jorge Álvarez no tuvo un buen rendimiento, no pasó de entregar la pelota a sus compañeros.
El 64% de los jugadores que entraron a la cancha ante Rumania pertenecen a Olimpia, una decisión errónea que ha tomado Falero para enfrentar a la selección de europea, que por cierto se vió muy débil ante los catrachos, quedando en deuda los jugadores del Albo. José García, de buen rendimiento, Jorge Álvarez, Carlos Pineda, cumplió más de siete meses sin jugar, Edwin Rodríguez, un individualista de primer nivel, que debió abandonar la cancha, Elvin Casildo, incapaz de levantar un centro al área rival y de remate, fue el encargado de anotar el único gol en su propia meta, Jorge Benguché, fatal en la delantera y Alex Guity, quién no regresó a la cancha en la segunda mitad, estos fueron los siete jugadores del Olimpia, que tienen al borde de la eliminación a la selección Sub-23 de Honduras.
