«Esto no es por mi papá, él no tiene nada que ver, sí, claro me ha apoyado llevándome a mis entrenos», el lateral izquierdo.
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Tegucigalpa, Honduras. Seguir los pasos de su padre, no es cosas fácil, en el fútbol prevalece la disciplina, la paciencia, la tolerancia, el sacrificio, no hay garantía que el éxito del papá, debe heredarlo el hijo por ser ley de la vida, al contrario, Joel Membreño, hijo de ex futbolista Nerlin Membreño, le espera un camino rocoso, lleno de lodo, más espinoso, lleno de atajos y competencias para convertirse en jugador profesional y aspirar a firmar su propia historia.
“Tengo 16 años, me ha inspirado mi padre, desde pequeño he entrenado con él, siempre estuve en la escuelita que él tiene, desde que tenía cinco años empecé a jugar fútbol, y a partir de esa fecha comenzó a gustarme, luego tomé la decisión de comenzar a entrenar con FBO” manifiesta el lateral izquierdo.
Para el aspirante a ser futbolista del Olimpia, no pesa el nombre del papá como muchas personas creen, si eso fuera cierto, ya estaría jugando en el equipo de primera división, la oportunidad la ha ganado por sus propios esfuerzos, sacrificios y su dedicación a sus entrenamientos.
“No, esto no es por mi papa, él no tiene nada que ver, sí, claro me ha apoyado llevándome a mis entrenos, no recuerdo que le haya hablado a un técnico para que meta a jugar, yo he tenido todos los procesos y he trabajado duro, siempre asistí a todos mis entrenamientos, he sido muy responsable, muy dedicado a mis entrenos, esto es algo que yo quiero, no es porque mi papá lo haya soñado” dijo un seguro, Membreño.
Joel Membreño, sabe que debe buscar hacer las cosas bien para tener opciones en el fútbol, no espera ser comparado con su padre, aunque juegue la misma posición de lateral izquierdo, busca hacer las diferencias.
“Mi padre era bueno, siempre me ha dicho que era muy responsable y dedicado al trabajo, siempre me cuenta que marcaba y que sabía subir al ataque, yo tengo que buscar superarlo en todo, bueno, si llego a jugar profesionalmente. trataré de ser mejor defensa, saber jugar la posición, evitar ser descuidado, y ser contundente a la hora de atacar, que por cierto lo hago con facilidad, mi mente la tengo puesta en aprender a jugar futbol”
Membreño, desde que apenas era un niño se familiarizó con la camisa del león, eso era lo que miraba en su casa, le tiene un gran cariño y respeto a la institución que en su momento le dio todo a su padre.
“Desde muy pequeño he tenido el amor por la camisa y ahora que soy parte del proceso de reservas, le voy agarrando más amor y respeto al Olimpia” concluyo el soñador futbolista.
El Membreño ha tenido tiempo para hacer la combinación perfecta con el fútbol, no ha abandonado sus estudios, como suele pasar con la mayoría de los deportistas, el próximo año asistirá a la universidad a estudiar ingeniería civil.