Tanto escándalo que se armó en Honduras cuando Fabián Coito decidió no convocar a Kevin López a la selección para jugar la Copa Oro en los Estados Unidos.
Al final, la razón la tuvo el técnico, el rendimiento de Honduras con Kevin López en ese certamen iba a ser igual o peor, nada iba a cambiar, ayer lo demostró el futbolista cuando le tocó defender la camisa de la selección, eso quedó reflejado la noche de ayer cuando el jugador motaguense inició de titular con la H ante la extremadamente débil selección de Puerto Rico. El miedo se apoderó de él.
A Kevin López le ha costado, no arrancó, no encajó en ningún tramo del partido, pasó desapercibido en el terreno de juego, debió extrañar la camisa de Motagua y a sus compañeros, es con la azul que el jugador tiene su mejor rendimiento en el terreno de juego.
Ayer demostró un bajo nivel, no arrancar ante una selección como Puerto Rico da mucho de que pensar, en el fútbol, los jugadores tienen un dicho, “sos un león de entreno”, es aquel futbolista que siempre es el mejor en los entrenamientos y a la hora de jugar un partido oficial es uno menos en la cancha, no abona en nada. Kevin López, encaja en el “león de la Liga Nacional”, ayer lo demostró, Con la selección ni para atrás ni para adelante, se comportó como un ratón.
El volante derecho jugó un partido para el olvido ante Puerto Rico, una selección que dio todas las ventajas para que todos los jugadores del H destacarán en el partido, el motagüense se olvidó de hacer lo que lo ha llevado a la selección, no levantó centros para los delanteros, no encaró como lo hace ante los jugadores del Vida, del Platense y otros equipos, no participó en el juego ofensivo, y cuando tuvo la pelota, casi todas las jugó para atrás.
Hay jugadores que no se motivan cuando se trata de un rival muy malo y vulnerable, podría ser el caso del motagüense, tal vez el verdadero talento de Kevin López en la H lo tenga reservado todo para jugar contra selecciones de mayor envergadura futbolística. Porque contra Puerto Rico solo estuvo sobre la cancha, se le olvidó jugar fútbol.